PLATAFORMA ESTATAL POR LA ESCUELA PÚBLICA
A la atención de Don Jesús Posadas,
Presidente del Congreso de los Diputados
Madrid, 28 de noviembre de 2013
Estimado
Presidente:
Las organizaciones que representamos a los profesionales de
la educación: CCOO, STEs-i, UGT, CGT, y MRPs; a las familias, CEAPA; y al
alumnado, Sindicato de Estudiantes, FAEST y Estudiantes en Movimiento; que
componemos la Plataforma Estatal por la Escuela Pública, hemos exigido en los
últimos meses al Gobierno del Estado la retirada inmediata de los recortes y
del Proyecto de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE),
así como el relevo de los actuales interlocutores al frente del Ministerio de
Educación, de forma muy especial del Ministro y de la Secretaria de Estado, por
entender que no son ya interlocutores válidos en este momento.
No necesitamos recordarle que la contrarreforma educativa
denominada LOMCE, que hoy pretende aprobarse definitivamente tras su paso por
el Senado, ha cosechado un aplastante rechazo de la Comunidad Educativa. Todos
los partidos del arco parlamentario, salvo el Partido Popular por razones
obvias, están en contra de dicha contrarreforma. Igualmente, todos los
sindicatos representativos en el ámbito de la enseñanza están en contra de la
misma, con independencia de la tendencia política a la que en principio se
pretenda asociarlos. La inmensa mayoría de las familias se han manifestado en
contra y los estudiantes se han movilizado, como el resto de los sectores,
también en contra de la norma. Y todo tipo de entidades sociales se han
pronunciado en oposición a los planes del Ministerio.
En las pasadas semanas, durante 35 días, se ha realizado una
Consulta Ciudadana por la Educación en la que han participado, al menos,
1.781.191 personas. Ciudadanos y ciudadanas que han sido invitadas a expresar
libremente su opinión en las mesas de votación instaladas mayoritariamente en
la calle, a la vista y al alcance de toda aquella persona que haya querido
participar. Casi dos millones de personas que pudieron expresar su opinión sea
cual fuere su posición ideológica personal y sin que su posible apoyo en la
urnas al partido político que sustenta al Gobierno les impidiera, como es
lógico y democrático, manifestarse en esta ocasión en el sentido que quisieran.
Usted sabe perfectamente que ello ha sido así, porque se le invitó
expresamente el día 12 de octubre, cuando paseaba ese día por la Puerta del Sol
y pasó por delante de la mesa de votación allí instalada, a que participara.
Usted respondió a la invitación que le hizo un representante de la Plataforma
Estatal allí presente en ese momento con un “Me temo que no”.
No sabemos qué temía usted, ni prejuzgamos lo que hubiera
respondido a la consulta en el caso de participar en ella, pero pudo hacerlo
como el resto de ciudadanos de este país. Sin duda, recordará ese momento.
El
resultado de la misma no puede ser más evidente e inapelable, ya que el 99,10%
de los ciudadanos consultados han manifestado su rechazo a los recortes en
educación y el 98,32% rechaza las políticas educativas del Gobierno central y
de muchos autonómicos, rechazando específicamente la LOMCE y el RD de Becas
vigente. Y sin embargo, el Ministerio ha seguido adelante. Y el Presidente del
Gobierno, al que se han dirigido varios escritos y al que hemos intentado ver
en dos ocasiones en el Palacio de la Moncloa, guarda silencio. Es muy posible
que no sepa qué decir. Tiene varias opciones y ninguna debe gustarle. O atiende
a las peticiones de los ciudadanos y frena los recortes, recupera la inversión
educativa, cesa al Ministro de Educación y retira la LOMCE, o continúa en
absoluta minoría social con la imposición de una contrarreforma que nace
muerta, como ocurre con todo aquello que se legisla sin escuchar a la
ciudadanía y en contra de sus derechos.
Hoy, el Congreso de los Diputados aprobará la LOMCE. Una
mayoría parlamentaria que se obtiene por una legislación electoral que se la
atribuye a un partido que, siendo el más votado, está soportado en una gran
minoría social, realizará uno de los actos más infames que se pueden concebir
en un Parlamento democrático, aprobar una Ley que tiene el rechazo democrático
de la inmensa mayoría de la sociedad. Sabemos que no está en su mano provocar
la paralización de dicha Ley, pero sí debe usted ser consciente, y ese es uno
de los motivos de esta carta, que hoy es un día triste para la Democracia de
este país y que usted presidirá el Congreso en un día en el que los derechos
constitucionales de la sociedad española se vulnerarán de forma flagrante y lo demostraremos
en los tribunales y en las calles, únicas vías que nos deja un poder
legislativo que nos agrede de semejante forma.
Por último, sí queremos dejar claro que los parlamentos
aprueban las leyes, pero que éstas nunca tendrán vida si los ciudadanos no las
sienten como justas y, por ello, las respetan. Hoy, no le quepa duda, es el
primer día del proceso por el que la LOMCE dejará de existir. Y, eso sí, será
el mismo parlamento que ahora la aprueba el que la derogue en el futuro. De
eso, nosotros, como parte imprescindible de la Comunidad Educativa, nos vamos a
encargar.
Reciba un
cordial saludo.
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